Una de las severas advertencias que el profeta Amos - y Oseas - hicieron al reino de Jeroboam II es una clave para entender estos días:
"También os detuve la lluvia tres meses antes de la siega;
e hice llover sobre una ciudad,
y sobre otra ciudad no hice llover;
sobre una parte llovió,
y la parte sobre la cual no llovió,se secó.
Y venían dos o tres ciudades a una ciudad para beber agua,
y no se saciaban; con todo, no os volvisteis a mí, dice YaHVéH".
(Amos 4:7-9)Uno de los efectos del llamado "Fenómeno del Niño" – que está de nuevo en actividad - es que llueve en donde antes no llovía y no llueve en donde antes sí lo hacía, convulsionando - entre otras cosas - las cosechas y dañando la economía de los países. Especialmente los del área andina: Ecuador, Perú, Bolivia, pero su efecto es global........
El mecanismo del clima es asimilable a grandes engranajes - o círculos – que cubren con su giro extensas áreas del globo terráqueo. Estos son discernibles en las fotos tomadas desde el espacio exterior (Eclesiastes 1:6). Y a estos mega-engranajes el "Fenómeno del Niño" altera su diámetro, cambia su velocidad y hasta el sentido de su giro alterándolo todo a nivel global. De este modo es normal que su efecto alcance el norte del continente americano - EE.UU. y Canadá -, Europa o Asia (en la nota 1 resumimos algunas de sus características)......El "Fenómeno del Niño" está absolutamente fuera del ámbito de la causalidad de las actividades humanas. No responde a las emanaciones de CO2 o al llamado “efecto invernadero”. Pero la cita de Amos nos advierte de lo que sí es una causa eficiente del desorden climático de esos días y de todas las épocas: el anhelo de YaHVéH de que su pueblo abandone la rebeldía y el pecado. La causa del desorden en el clima es entonces el desorden moral planetario, no las emanaciones de CO2. Vamos a fundamentar esto ya que es una forma de entender con integridad el mensaje bíblico.El rey Salomón hizo esta oración en la dedicación del templo:
“Si el cielo se cerrare y no lloviere,
por haber ellos pecado contra ti,
y te rogaren en este lugar
y confesaren tu nombre
y se volvieren del pecado,
cuando los afligieres,
tú oirás en los cielos,
y perdonarás el pecado de tus siervos
y de tu pueblo ISRAEL,
enseñándoles el buen camino en que anden;
y darás lluvias sobre tu tierra,
la cual diste a tu pueblo por heredad”.
(1 Reyes 8:35-36)Aquí se nos relata el principio básico que nos permite entender porque el clima hoy está colapsando: el pecado cierra los cielos (altera el clima), y el arrepentimiento lo restaura. El clima de la tierra de la promesa - la heredad de Jacob - integra la herencia del pueblo de Dios/Elohim que Él done un territorio con el clima alterado. La armonía y predecibilidad del clima forma parte de la economía del territorio, regula sus siembras y sus cosechas. Una cosa - un territorio - supone la otra - un clima característico e inseparable de ese territorio - y esto se aplica a todo el planeta Tierra que "no fue hecho para la nada, sino para ser habitado". Pero es que ante las nubes de apostasía que se ven en el horizonte, los cielos se cierran y la tierra tiembla........Cuando el profeta Samuel amonesta a ISRAEL por haber pedido un rey – imitando a las naciones vecinas – rechazando así el gobierno de YaHVéH y sus profetas lo hace de este modo:"¿No es ahora la siega del trigo?
Yo clamaré a YaHVéH, y él dará truenos y lluvias,
para que conozcáis y veáis que es grande vuestra maldad
que habéis hecho ante los ojos de YaHVéH,
pidiendo para vosotros rey".
(1 Samuel 12:17)Aquí vemos que el mayor golpe de Autoridad de YaHVéH - Creador de los cielos y tierra - sobre su pueblo escogido es hacerles notar que el clima le obedece a Él y puede alterarlo si así lo quiere. El profeta Jeremías deja este principio bíblico básico muy claro:"Por eso se demoraron las lluvias,
y no llegaron los aguaceros de primavera.
Tienes el descaro de una prostituta;
¡no conoces la vergüenza!
(Jeremías 3:3)"No reflexionan ni dicen:
Temamos al Señor, nuestro Dios,
quien a su debido tiempo nos dá la lluvia,
las lluvias de otoño y primavera
y nos asegura las semanas
señaladas para la cosecha”.
(Jeremías 5:24)¿Hay alguna duda de Quien el que domina al clima a su antojo produciendo abruptas variaciones según el comportamiento de su pueblo?. Sin embargo muchas veces lo olvidamos y pretendemos que los meteorólogos nos den las respuestas fundamentales. Ellos solo pueden medir lo que pasa, pero rara vez explicar porqué pasa. Ellos no saben que produce el llamado fenómeno del Niño ni porqué se generan los huracanes. Pueden hacer estadísticas y enmarcarlos en algunos parámetros, pero el fenómeno en sí esta fuera de su explicación. En cambio en la Biblia vemos una y otra vez el clima ser alterado violentamente por razones que responden a Su voluntad. Y aún a la voluntad de sus Siervos aunada con la Suya. En Santiago 5:16-18 se lee:"La oración eficaz del justo puede mucho:
Elías...oró fervientemente para que no lloviese,
y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses.
Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia,
y la tierra produjo fruto"también podemos recordar que nuestro Señor le habló a la tormenta y esta cesó de pronto...y entonces los discípulos ¡lo adoraron!. O que el mar embravecido se calmó cuando el desobediente Jonas fue echado por la borda de la embarcación que había tomado para huir de su misión.
(Ver también Job 12:15; 28:26; 38:25; 5:10)La verdad es que el clima es armonioso en la medida en que el comportamiento del pueblo que lo habite - sobre todo si se trata de su Su pueblo elegido, y los cristianos también lo somos - esté en armonía con Su ley moral. Si el comportamiento moral del pueblo es desordenado y rebelde, el clima también se enrarece y queda fuera de control. Así de simple........En la etapa final del Imperio Romano impío, antes de que Constantino sacara a los cristianos de las mazmorras, cuando los emperadores - y el pueblo - chapoteaban en la impiedad, así era el estado del clima (nota 2):"La peste fue permanente por espacio de doce años (250-292); las carestías frecuentes; los terremotos, las erupciones volcánicas no dejaban a los pueblos punto de reposo, y para colmo de desventura y para añadir nueva aflicción, los bárbaros se mostraban mas amenazadores que nunca...La desventurada Campania fue asolada por huracanes que arrasaban mieses, los arboles y las casas.... En Roma, la peste diezmo a todas las clases sociales, los edificios estaban atestados de cadáveres, las calles de fúnebres cortejos. Hombres y mujeres, niños y ancianos, esclavos y ciudadanos perecían en gran numero...En solo un otoño se registraron treinta mil defunciones en el templo de Venus Libitinia... "El terror fue universal y, según Tacito, se contaban a centenares las personas a quienes el terror arrebato el juicio".¿Parecido a nuestros días, no es verdad?. Y aquí se habla no solo de una severa emergencia climática sino de la peste, carestía, terremotos y erupciones volcánicas, temas también de actualidad. Sin embargo no había en esos días emanaciones de CO2, ni sociedad industrial, ni "efecto invernadero". Pero la impiedad era tanta que atraía sobre el territorio madre del Imperio terremotos, huracanes, volcanes, plagas, y carestías. Es un modelo a escala pequeña de las cosas que habremos de sufrir durante la apostasía planetaria que está al acecho, y ya está aquí.(continúa)--()--nota 1): El "fenómeno del Niño" se produce por la variación en la temperatura de las masas de agua superiores y superficiales del océano Pacifico ecuatorial, combinado con un cambio de dirección de los vientos Alisios que no tiene explicación científica. Se trata entonces de la relación de dos fenómenos: el oceánico y el atmosférico (de ahí el nombre con el que se le conoce Oscilación Sur: ENOS).Entonces una superficie oceánica mayor que el territorio de los EE.UU. – y de 80 metros de profundidad - aumenta de pronto ¡hasta 9º! su temperatura (lo que no puede tener ninguna causal humana) alterando los parámetros climáticos y ecologicos de la costa del continente americano desde Chile a California pero causando desordenes severos - y repentinos - mucho mas allá de estos efectos inmediatos. Y en la atmósfera, la rotación de los Alisios cambia el ciclo de lluvias de Oceanía, Indonesia e India, pero no siempre de la misma forma, produciendo severas emergencias climáticas. En algunos lugares incendios debido a sequías prolongadas, en otros inundaciones arrolladoras.Todo es aleatorio en el "Fenómeno del Niño" a partir de el calentamiento del océano Pacifico ecuatorial y su interacción con la rotación de los Alisios. Y nada tiene que ver con el "calentamiento global" ya que hay registros de alteraciones climáticas muy pronunciadas desde la época del Imperio Inca y uno de los picos se alcanzó en la primera mitad del siglo XX cuando ese tema era inexistente.nota 2): tomado de "Los Dioses de Grecia y Roma", publicado en el año 1881, mucho antes por lo tanto de que se hablara de cambio climático.nota 3): no es necesario resaltar que los anti-valores se están abriendo paso a velocidad de vértigo en el mundo de hoy. Y esto es especialmente notorio en Europa y en parte de los EEUU. La homosexualidad permisiva, el adulterio, la “vanidad de la vida”, el aborto y la manipulación genética se han convertido en el “pensamiento oficial” de la "ciencia", marginando a quien se guía por principios universales de fe cristiana, que es llamado agresivamente: "fundamentalista"........
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario